Las normativas anticontaminación son tan estrictas que los coches ya nunca serán como antes.
A partir de 2015 en que entró en vigor la Euro 6, los "coches normales" ya "no tienen prestaciones". Ahora lo que prima es la eficiencia y las bajas emisiones.
Continua habiendo deportivos, pero están penalizados por los impuestos a las emisiones de CO2... que les hacen subir de precio.
Por este motivo ya casi no quedan pequeños GTI, como el Fiesta ST... o un Polo GTI. El Polo está por encima de los 32.000 euros. (Son coches pequeños para pagar ese precio...) Por ese precio prefiero 1000 veces un Karoq
A los fabricantes les interesa homologar unas emisiones muy bajas. Por este motivo el modo de conducción "Normal" se parece mucho al "ECO".
En los coches con cambios manuales apenas se nota la diferencia. Se supone que la gestión de la inyección hace pequeños cambios para ahorrar unas décimas de litro. Pero la actitud del conductor y las incidencias del tráfico afectan tanto al consumo, que en muchas ocasiones parece que no hay diferencia.
Con los coches equipados con DSG ocurre lo mismo. Casi no hay diferencias en el consumo entre un modo y otro. Solo cuando repites muchas veces el mismo trayecto te das cuenta de que el modo "ECO" ahorra entre 0,2 y 0,3 litros.
En los trayectos con tramos en subida apenas hay diferencia. Si conduces suave la carga del acelerador es practivamente la misma en ECO o Normal. Es en las bajadas cuando el modo ECO permite optimizar la gestión del cambio y aprovechar mucho mejor la energía.
Pero hay que estar atento. El modo vela puede aumentar el consumo si en una detención frenas bruscamente al final. En modo vela el coche gasta entre 0.5 y 0.9 L/100 mientras que en modo retención el consumo es 0. En el caso de una detención hay que alargar al máximo el tiempo que el coche está en retención empezando con mucha antelación... (el coche no es capaz de predecir... y estará en modo vela hasta el final)